Capaz de sorprenderme por mucho que la conozca. Capaz de ver el vaso ya no medio lleno, sino desbordando. Capaz de seguir siendo ella misma a pesar de lo que diga la gente a sus espaldas, y disfrutar todavía más de quien es. Capaz de estar ahí en cada uno de mis momentos más duros. Capaz de hacerme sonreír, cuando estoy a punto de llorar.¡GRACIAS!