Cuando le miró pestañeando, vio que una sonrisa maliciosa se extendía por su rostro.
-¿Qué? – preguntó de mala gana.
+ Ojalá dejaras de intentar desesperadamente de atraer mi atención de este modo -dijo él-. No puedo evitar que se me escape una sonrisa.
-¿Qué? – preguntó de mala gana.
+ Ojalá dejaras de intentar desesperadamente de atraer mi atención de este modo -dijo él-. No puedo evitar que se me escape una sonrisa.
Dicen que el amor es cosa de dos; intentémoslo, ¿por qué no?.
Será el secreto que llevo tan dentro, que en el fondo me desnuda la verdad; se olvidaron las palabras, las promesas que bordamos, hoy tu corazón se escapa y no te tengo.ENAMORADA, TEJIENDO LUNAS EN LA MADRUGADA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario